El lunes, asistimos a clase en la Piscina
Municipal de Frigsa, para llevar a cabo una evaluación inicial
de nuestra capacidad de natación. La prueba consistía en:
1. COORDINACIÓN MOTORA DE INSPIRACIÓN Y EXPIRACIÓN: ser capaz de sumergir la cabeza aguantando el
aire y después subir a la superficie y respirar con coordinación.
2. BUCEO: ser capaz de,
mientras se aguanta la respiración, recorrer una distancia por debajo del agua.
3. FLOTACIÓN ACTIVA: ser capaz de
mantenernos a flote únicamente con la ayuda de brazos y piernas, sin tocar el
fondo de la piscina ni estar agarrados a ningún objeto flotante.
4. PIERNAS DE BRAZA:
4.1 MOVIMIENTO DE PIERNAS: se pretendía
evaluar si la posición de piernas en el estilo braza era el correcto y si se
ejecutaba de manera correcta.
4.2 POSICIÓN DE PIES: se calificaba que
los pies estuviesen correctamente colocados.
5. CROL (RESPIRACIÓN LATERAL): se evaluaba que la respiración en la
modalidad de crol fuese lateral y no levantando la cabeza.
6. ESPALDA: se tuvo en cuenta si éramos capaces de nadar correctamente de
espaldas sin que esto provocara hundimiento.
7. ZAMBULLIDA: se observó la forma en que nos lanzábamos al agua, bien de pie, de
cabeza o si no realizábamos ninguno de estos y nos sumergíamos utilizando las
escaleras de la piscina.
8. VALORACIÓN GLOBAL: teniendo en cuenta los aspectos evaluados
anteriormente, poner una nota numérica (1-4)
Personalmente, me parece una buena forma de evaluar las capacidades de una persona que nunca ha nadado y quiere hacerlo, ya que nos da una primera evaluación muy buena de que aspectos debemos mejorar y como debemos orientar las sesiones para que esta persona mejore su nivel de natación.